Carbono neutralidad: metas para la huella de carbono 2050

Carbono Neutralidad

Este criterio busca que las empresas tengan la meta de ser carbono neutrales en GEI a más tardar al 2050 y que establezca un plan con objetivos a corto y largo plazo basados en la ciencia para lograrlo, que puede incluir soluciones basadas en la naturaleza y otras soluciones de remoción de carbono. Las emisiones GEI consideran el alcance 1, 2 y los elementos más relevantes e influenciables del alcance 3.

Preguntas Frecuentes sobre carbono neutralidad y su huella:

La carbono neutralidad significa alcanzar un equilibrio entre las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), como el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O), liberadas a la atmósfera y la absorción o eliminación de estas. En otras palabras, se busca que las emisiones de gases de efecto invernadero sean equivalentes a cero.

Esto es muy importante en la lucha contra el calentamiento global y los efectos del cambio climático. Las actividades humanas han aumentado mucho las emisiones de estos gases. Esto sucede principalmente por la quema de combustibles fósiles.

¿Cómo lograr ser carbono neutro?

Para lograr ser carbono neutro, se deben seguir tres pasos principales:

  1. Cálculo: Es fundamental realizar un cálculo de gases de efecto invernadero (GEI) para determinar la huella de carbono de una organización, producto o servicio, identificando las fuentes de emisiones directas e indirectas.
  2. Reducción: Una vez identificadas las fuentes, se deben implementar planes de reducción de emisiones. Esto incluye medidas como la eficiencia energética, la adopción de energías renovables, la mejora de los medios de transporte, el teletrabajo, y la reducción del consumo de carne.
  3. Neutralización/Compensación: Las emisiones que no se pueden reducir se neutralizan o compensan apoyando proyectos que reducen las emisiones en otro lugar o que capturan CO2. Esto a menudo se realiza a través de la adquisición de bonos de carbono de proyectos de desarrollo sostenible. El objetivo es que las toneladas de CO2 emitidas sean igualadas por las toneladas de CO2 eliminadas o compensadas.

 

Que Chile sea carbono neutral significa que el país se ha comprometido antes las Naciones Unidas a tener cero emisiones de gases de efecto invernadero. Esto debe lograrse a más tardar en el año 2050. Este compromiso se enmarca en la Ley Marco de Cambio Climático y busca reducir la vulnerabilidad y aumentar la resiliencia del país frente a los efectos adversos del cambio climático. Para ello, se revisarán y actualizarán las estrategias cada cinco años, buscando una descarbonización progresiva de su matriz energética.

La ley de carbono neutralidad en Chile se refiere a la Ley Marco de Cambio Climático, promulgada en 2022. Esta ley establece como meta que Chile sea carbono neutral y resiliente al clima a más tardar el 2050. La ley es un hito medioambiental que fija acciones concretas para diversos ministerios y establece los instrumentos de gestión del cambio climático para alcanzar esta ambiciosa meta, incluyendo la Estrategia Climática de Largo Plazo y las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC).

La huella de carbono mide el impacto de las actividades humanas en el medio ambiente. Se expresa en la cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) que se liberan a la atmósfera. Consiste en cuantificar todas las millones de toneladas de emisiones, directa o indirectamente, de gases como el dióxido de carbono (CO2), metano (CH4), y óxido nitroso (N2O), generadas por un individuo, una organización, un evento, o el ciclo de vida de un producto o servicio.

Estas emisiones se suelen expresar en toneladas de CO2 equivalente (CO2eq). La medición distingue entre:

  • Emisiones directas (Alcance 1): Provienen de fuentes que son propiedad o están controladas por la entidad (ej., quema de combustibles fósiles en vehículos o equipos propios).

Emisiones indirectas (Alcance 2 y 3): Son generadas por la electricidad consumida y por las actividades de la cadena de valor de la entidad (ej., transporte de materias primas, disposición de residuos).

En Chile, el sector que genera la mayor cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) es el sector Energía, representando el 75.6% de las emisiones totales de CO2. El aumento de las emisiones en este sector proviene de todos los tipos de combustibles fósiles (gas, petróleo y carbón). Le siguen los sectores de Procesos Industriales y Uso de Productos (IPPU) y Agricultura.

Otras actividades que contribuyen significativamente a la huella de carbono incluyen el transporte (especialmente impulsado por petróleo y derivados), y ciertas industrias como la minería y la manufacturera debido a su orientación a la exportación.

La huella de carbono es la cantidad de gases de efecto invernadero que se emiten directa o indirectamente por nuestras actividades. Podemos reducirla de diversas maneras:

  • Movilidad sostenible: Optar por el transporte público, compartir vehículos, usar la bicicleta o vehículos eléctricos para reducir las emisiones de gases asociadas al uso de combustibles fósiles.
  • Eficiencia energética en el hogar: Aprovechar la luz natural, apagar luces y desconectar aparatos inactivos, cambiar a electrodomésticos de alta eficiencia energética (categoría A+ o superior) y utilizar luces LED. Estas acciones contribuyen a una significativa reducción de emisiones.
  • Consumo consciente: Evitar comprar productos innecesarios y reciclar desechos, lo que ayuda a disminuir la producción y el desecho de objetos contaminantes.
  • Dieta: Reducir el consumo de carne bovina, ya que su producción genera una alta huella de carbono.
  • Apoyo a energías renovables: Fomentar y consumir energía proveniente de fuentes renovables, que no generan emisiones de GEI.

Todas estas acciones son importantes para mitigar el calentamiento global y sus efectos, como el aumento del nivel del mar.

La huella de carbono individual promedio en Chile se estima en 4.66 toneladas de CO2 por año. A nivel nacional, la huella de carbono está fuertemente influenciada por sectores como la energía, la industria y la minería, y la agricultura. Las exportaciones, particularmente de la minería y parte de la industria manufacturera, presentan la mayor participación en la huella de carbono de la economía chilena.