Economía Circular
11 de agosto de 2022
La Ciudad Posible junto a Coca-Cola recuperarán seis mil toneladas de plástico PET en 2023

Por primera vez en Chile, recicladores de base, gestores y municipios, entre otros actores de la cadena de reciclaje, se reunieron en un encuentro nacional para analizar y compartir oportunidades que fortalezcan la gestión local de residuos. Justo cuando la implementación de la Ley REP ya es una realidad.

Un evento único se llevó a cabo en el Centro de Extensión UC. Por primera vez se realizó un encuentro a nivel nacional entre los diferentes actores de la cadena de valorización de residuos como recicladores de base, gestores privados y municipios. En el Seminario “Claves y desafíos de la gestión circular de PET”, organizado por la La Ciudad Posible, con el apoyo de Coca-Cola, País Circular, la Asociación Nacional de Recicladores de Base y con el patrocinio del Ministerio del Medio Ambiente, los participantes tuvieron la oportunidad de reflexionar y compartir experiencias para fortalecer la gestión local de residuos.

En el encuentro, la ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, destacó que “este es un encuentro muy importante, ya que fomenta el llamado de la colaboración entre los recicladores de base y gestores en general, que son una pieza clave para la efectiva implementación de la Ley REP. Aquí nos encontramos con distintos actores de la economía circular y cadena de reciclaje, quienes son actores centrales de nuestra administración y que entendemos debemos potenciar por el bien de Chile y sus habitantes. Sabemos que la implementación de esta ley llevará al reciclaje a nuevos niveles en nuestro país, generando empleos verdes y valor social”.

En 2018 Coca-Cola asumió un compromiso sin precedentes a nivel global: recolectar el 100% de los empaques que pone en el mercado al 2030. “Junto a la Fundación La Ciudad Posible, Latitud R y con el apoyo del Ministerio del Medio Ambiente, lanzamos una iniciativa inédita y única, la red “Conecta Recicla y Colabora”, que involucra a recicladores de base, gestores y valorizadores, todos eslabones vitales en la cadena de reciclaje. En nuestro primer levantamiento identificamos 5 mil toneladas de plástico de botellas y para este 2022 nos propusimos como meta recuperar 1050 toneladas de PET”, señaló Paola Calorio, directora de Asuntos Públicos, Sustentabilidad y Comunicaciones de Coca-Cola Chile, Bolivia y Paraguay.

Entre los principales resultados entregados durante el seminario por parte de Ciudad Posible, se encuentra que para 2023 se espera identificar y potenciar la llegada de 6.000 toneladas recuperadas de plástico de botellas de agua, jugos y bebidas (PET), junto a aliados estratégicos como Ecomax, Recimaq, Morcas y la ANARCH. Para eso, durante estos últimos dos años se ha entregado equipamiento, apoyo técnico a recicladores de base, gestores y municipios de diversas regiones del país, y se ha sensibilizado a 12 mil familias con una plataforma digital junto a Rembre. Para el 2023, se espera una mejora continua y la entrega de set de herramientas para la integración y robustecimiento de la cadena, además de la generación de un sistema de trazabilidad.

Mayling Yuen, directora de La Ciudad Posible recalcó que “estamos muy orgullosos de los resultados que hemos obtenido en este año de trabajo colaborativo con diferentes actores que hoy nos acompañan. Hemos sido un lazo que ha unido y coordinado a una empresa como Coca-Cola con recolectores de base, gestores y municipios; nosotros vamos al territorio, reconocemos la realidad de cada comunidad y trabajamos respetando sus procesos y conocimientos. Estamos visibilizando una potente red que crece cada día y que se encamina hacia la circularidad de nuestro territorio para vivir en mejor ambiente para todos”.

En la jornada también se desarrollaron círculos de conversación sobre los desafíos de la cadena de reciclaje del PET dirigido a gestores de residuos, valorizadores de residuos, actores municipales, representantes públicos, gremios y la sociedad civil. En los últimos años el plástico de botellas de bebidas, jugos y aguas (PET) se ha convertido en un material altamente reciclado y en una importante fuente de ingreso para los actores de la cadena, sobre todo por su alto poder de reúso, que permite transformarlo una y otra vez en nuevos productos.