En las oficinas de Fundación Chile se realizó la primera sesión del módulo, en la que participaron nueve empresas de Acción. Durante la jornada se profundizó en la crisis hídrica, en los planes que puede implementar el sector privado y se compartió un caso empresarial sobre acciones concretas de resiliencia.

En el marco de la semana por el día Mundial del Agua y con el objetivo de impulsar una aproximación territorial a la crisis hídrica y a la necesidad de articulación con otros actores para promover la seguridad hídrica, incluyendo a las comunidades, comenzó el tercer módulo del Programa Acción al Territorio, llamado “Gestión Hídrica y Territorios”, liderado por Ángeles Bustamante, jefa de Proyectos de Acción, sesión que tuvo lugar en las oficinas de Fundación Chile (FCh) y en la que participaron nueve empresas de la red de Acción, junto a la fundación Amulén y el Fondo del Agua Santiago Maipo.

Para comenzar, Claudia Galleguillos, líder en Negocios Sustentables de FCh, dio un contexto de la situación, señalando que hasta el 2014 la temática principal relacionada al agua eran los derechos de agua, o sea, que se le daba sólo una connotación legal. Para indagar en la realidad de este elemento, en 2017 se realizó una radiografía, la que corroboró que Chile es uno de los treinta países del mundo con mayor riesgo hídrico y uno de los cuatro donde esta problemática se manifestará de manera drástica y radical.

Según explicó Galleguillos, la sequía afecta a Chile desde el 2000 y uno de los grandes problemas actuales es la profundización de pozos -sobre explotación de aguas subterráneas-, porque con esta actividad se dificulta la recarga de los acuíferos. Sobre este punto, estudios señalan que 147 pozos de los 203 (72%) que se han medido presentan tendencias negativas significativas. “Consumimos más agua de la que el sistema es capaz de generar. Estamos consumiendo las grandes reservas”, afirmó. De hecho, producto de esta extracción, el suelo de Santiago está bajando unos 25 milímetros por año.

Asimismo, de acuerdo al análisis que ha realizado FCh en la cuenca del Maipo y Maule, les aconsejó a los representantes de empresas invertir en Soluciones Basadas en la Naturaleza (SBN) y en eficiencia hídrica a la hora de abordar las brechas existentes, porque van en línea con planes más costo-eficientes. Junto a esto, puntualizó que “no da lo mismo dónde invertimos para recuperar el ciclo hídrico. Es importante saber lo que el territorio dice para hacer una inversión inteligente”.

Agregó, además, que para acordar las iniciativas que se pondrán en práctica en un área determinada, no es recomendable trabajar con las percepciones de las comunidades, pues, por desconocimiento, se suelen solicitar embalses y desaladoras. Por eso, es necesario entregar información completa y oportuna, pues con mayor cantidad de datos, se pueden tomar mejores decisiones y se puede lograr la valorización de las SBN.

Para finalizar, Valentina Vial y Francisca Vildósola -Gerente de Asuntos Corporativos y abogada de Sendero, respectivamente-, presentaron la estrategia hídrica de dos de los once parques que tienen en el país, ubicados en Villa Alemana y Maipú. Ambos se encuentran en el nivel 2 del proceso de Certificado Azul, impulsado por la Agencia de Sustentabilidad, instrumento voluntario mediante el cual las empresas pueden implementar acciones concretas de resiliencia para enfrentar los efectos adversos provocados por el cambio climático, aplicando la herramienta Huella del Agua (ISO 14.046).

Partieron en 2022 midiendo su huella del agua (nivel 1, donde establecieron una cartera de proyectos). Ahora esta temática es parte del plan estratégico del negocio, con medidas a corto, mediano y largo plazo. Algunas de las acciones ejecutadas son: tecnificación y automatización del riego, que otorga una eficiencia del 70%, capacitaron al equipo de riego, retiraron el pasto ornamental y se levantó plano de paisajismo con especies de bajo requerimiento hídrico.