Empresas, gobiernos y ciudadanos, sabemos que nuestro futuro depende de las transformaciones que seamos capaces de realizar rápidamente.
La crisis climática, social y económica que sacude a la humanidad, nos muestra que estamos habitando en los bordes de todo lo que sostiene nuestro futuro.
Hacer las cosas de otra manera, no es suficiente, necesitamos que nuestras acciones aspiren a reparar los sistemas de los cuales dependemos como humanidad.
La regeneración es un cambio de paradigma y de mentalidad que implica, no solo hacer mejor las cosas, sino que de volver al origen algo que, en un comienzo estaba en bienestar y armonía y que, actualmente, lo ha perdido.
No se trata solo de volver atrás, sino que se trata de saber qué vamos a buscar ahí.
Para recuperar el equilibrio perdido debemos ir a la raíz.