Cada vez escucho más seguido sobre tornados donde no los había; olas de calor y frío más acentuadas; aluviones más frecuentes, y tiendo a pensar, ¿Qué pasó? ¿Cómo llegamos a esto? Si hace tiempo estábamos advirtiendo el cambio climático, ¿Quizás nadie creyó que existía? ¿Nadie pensó que era posible que las consecuencias llegaran tan rápido y que nos iban a tocar? Hay gente que lo pasa muy mal o peor, muere, así que esto necesita que nos apuremos.

Cualquiera sea la razón, el cambio climático ya llegó, y creo que nos encontró sin tener un plan de acción a pesar de las advertencias.

¿Cómo empujamos para acelerar las cosas? Creo que hay varias formas. Una con un poco más de conocimiento, entendiendo que las acciones y decisiones que cada una de nosotras y nosotros tomamos, contribuyen a nuestro planeta. Desde cuánto, qué y cómo consumimos, si reutilizamos y reciclamos, tiene influencia.

Pero no todo puede quedar ahí. Eso sería tratar de tapar el sol con un dedo. También están las acciones que pueden tomar las empresas, que tiene ciertas similitudes con lo anterior, pero incorporando producciones más sustentables, incorporando abastecerse con energías más limpias y usando materias primas más amigables con el medio ambiente y elegir proveedores que aporten al planeta.

Y me queda un actor fundamental: el Estado. Ninguna de las acciones anteriores es eficiente si las políticas públicas no se centran en tres puntos fundamentales: uno, entregar un marco regulatorio que permita que todas las acciones anteriores sean coordinadas y por lo tanto eficientes. Dos, desarrollar una matriz energética que nos permita abastecernos sustentablemente, y tres, que dé el ejemplo.

El primer punto es importante porque así logramos que los esfuerzos de cada persona/empresa no se pierdan y además que las prácticas sustentables se vayan convirtiendo en costumbre; el segundo porque generalizamos y masificamos el uso de energías limpias, y el tercero, me parece que tiene un peso extraordinario, ¿cómo sería nuestra realidad si el estado usara su poder de compra para impulsar una economía más circular? Imagínense que los productos y servicios, además de cumplir con especificaciones técnicas, tuvieran que cumplir con requisitos de sustentabilidad. Sé que eso es parte del espíritu de la Hoja de Ruta Para un Chile Circular al 2040 pero, ¿No será mucho tiempo al 2040? ¿Por qué las compras públicas no se están haciendo ahora bajo estos estándares si es posible?

El planeta necesita de todas las personas, empresas y también del Estado, y no solo como ente regulador, sino que también como parte activa del sistema circular que queremos para nuestro país. Espero que el próximo gobierno se alinee con las necesidades del planeta para que pueda volver a respirar en paz.