Ética y Gobernanza
14 de febrero de 2024
Casas de estudio y publicidad ética | Maribel Vidal

Estamos en la época de procesos de matrículas, y por lo mismo, es fundamental resaltar la responsabilidad que tienen los establecimientos educacionales al momento de publicitar su oferta de valor. En este periodo, es crucial recordar que las diversas instituciones deben actuar de manera consciente y respetar los principios éticos que guían a la industria.

Sabemos que no es fácil competir, y que el esfuerzo comunicacional para convencer tanto a estudiantes como apoderados de escoger una casa de estudio en particular, es una tarea que involucra esfuerzo e inversión para la institución y para las familias de los jóvenes que buscan la mejor propuesta. Por esas razones, se recomienda ser especialmente responsables al momento de diseñar las campañas publicitarias en este rubro. El Código de Ética y Autorregulación Publicitaria, menciona en su artículo 32, que la publicidad relacionada con la educación no puede garantizar obtener el éxito personal o empleos al terminar sus estudios, y menos asociar los resultados a la sola inscripción o matrícula en cursos o carreras.

En esta misma línea, la publicidad tampoco puede afirmar o inducir al público a creer que un establecimiento, carrera o curso cuenta con acreditación oficial, autorización, aprobación, ranking o un estatus específico, a menos que el avisador pueda respaldar dicha información.

Otro aspecto importante es la ética al momento de hablar de dinero. Respecto a este tema, el artículo menciona que tanto las instituciones como los servicios educacionales que hagan mención a precios, deberán indicar claramente el valor total a pagar por el alumno o las condiciones específicas, de descuentos o gratuidad, que estén efectivamente disponibles.

Asimismo, la publicidad vinculada a la educación debe ser precisa al abordar los diferentes niveles o grados de enseñanza, utilizando la nomenclatura oficial establecida en las normativas pertinentes que regulan este ámbito.

El respeto por la ética y autorregulación publicitaria, así como también la transparencia, son pilares fundamentales que deben guiar las acciones en la industria y es, en instancias como el periodo de matrículas, que se debe demostrar nuestro profesionalismo y responsabilidad.