Víctor Moctezuma, CEO de la consultora iLab, participó en esta instancia y entregó herramientas para crear una mentalidad exponencial, con estrategias disruptivas para la resolución de las problemáticas empresariales de hoy.
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Las empresas se enfrentan a grandes desafíos y, para adaptarse a nuevos escenarios, es fundamental que aprovechen las oportunidades que se presentan para generar innovaciones sostenibles.
En este contexto se desarrolló el webinar “Cómo Incentivar la Innovación Empresarial”, en el que participó Víctor Moctezuma, CEO de la consultora iLab, quien entregó herramientas para crear una mentalidad exponencial, con estrategias disruptivas para la resolución de las problemáticas empresariales de hoy.
Moctezuma inició su presentación refiriéndose a las nuevas tendencias y a la visión de futuro que tienen las empresas. Junto a esto señaló que antes de innovar, es importante que las organizaciones reflexionen y entiendan desde dónde parten, qué experiencias anteriores tienen, y qué ocurre cuando alguna de ellas fracasa. “Tal vez fue porque no se incorporó la tecnología adecuada, no se tomaron las decisiones de inversión a tiempo o porque las personas no enfrentaron las mejores decisiones”.
Junto a esto indicó que una de las fórmulas con la que se construye un negocio en un mercado, es ubicar el propósito en el centro. “Ahora se busca que las empresas tengan esta forma de entenderse como un actor social, en la cual la forma en la que transforman las materias primas tiene que ser responsable, la forma en la que tratan a las personas debe ser responsable“.
También respondió la pregunta “¿Qué puede volver obsoleta a una empresa?” Y la respuesta fue “no entender la realidad del mercado que se construye diariamente, no trabajar de forma más eficientes los recursos y no saber con quién vincularnos”.
Moctezuma precisó que la innovación requiere de tiempo. “Cuando se buscan los temas de innovación, se quiere llegar directamente a la invención, se quiere tener la fórmula mágica que me permita hacer que todo suceda y, además, que sea muy rentable, pero no se tiene la paciencia de entender que este es un proceso de continua adaptación. La evolución es un aprendizaje continuo que permite a las organizaciones entender las limitaciones que tienen sus recursos y descubrir las capacidades que pueden adquirir desde otros, para incrementar el valor de sus propios recursos”.
Y agregó que “para cambiar, se necesita incorporación de actores, de procesos, de fórmulas y, sobre todo, de entendimientos diferentes para poder apuntar a un propósito específico que es un nuevo consumidor. No entender al consumidor como al de siempre, el consumidor va a cambiar y va a seguir cambiando”.